Lusitania Martínez Profesora e investigadora de Filosofía.

Nació en San Cristóbal. Es licenciada en Filosofía Pura, de la UASD. Investigadora de la temática mesiánica, en 1991 publicó el libro Palma Sola, Opresión y Esperanza: su geografía mística y social, donde desentraña las diversas causas y la naturaleza del movimiento campesino de identidad popular. Es también autora del libro Actitudes femeninas ante los oficios no tradicionales (Análisis de un caso: Los Mina Norte, RD, 1994), así como de la antología Filosofía Dominicana: Pasado y presentePertenece a la Academia Dominicana de Ciencias desde el año 1997, donde coordinaba la Comisión de Filosofía.

Historia de las ideas filosóficas y de género en la República Dominicana, de la Prof. Lusitania Martínez, aborda dos temas esenciales en la historia de las ideas en el país: el estatus del pensamiento filosófico y el devenir de las ideas de género y del movimiento a favor del derecho de las mujeres.

En una primera parte se sientan las bases para «<un cierto ordenamiento cronológico, histórico y conceptual de las ideas filosóficas» desde la colonia hasta el tiempo presente, tratando de dilucidar si los dominicanos podemos hablar de un pensamiento filosófico dominicano o de filosofía hecha en la República Dominicana. Para ello se hace un recuento de los principales pensadores y pensadoras nacionales, de las ideas que han trabajado y, en el caso de los contemporáneos, de sus opiniones con respecto a la existencia de la filosofía en el país. En este sentido, se hace una especie de balance o rendición de cuentas de lo que ha sido la historia de las ideas filosóficas en
el contexto dominicano.

En la segunda parte, se estudia la evolución del movimiento feminista nacional desde la segunda mitad del siglo XIX hasta la consecución del voto femenino en 1942. El criterio que se toma en cuenta para clasificar a las pensadoras de esa época en pre-
feministas o feministas propiamente hablando es si rompen o no con la normativa de la dimorfia sexual, esto es, si rompen o no con la asignación de roles distintos en función del sexo, considerándose como real feminismo el que reclama la igualdad de hecho y de derecho, sociopolítica y económica de las mujeres y los hombres.

Finalmente, la obra estudia las contradicciones de un feminismo nacional que logró
el derecho al voto en plena dictadura trujillista y que no pudo evitar ser en cierto modo instrumentalizado por la tiranía.