El profesor Edwin Santana expresó lo siguiente:
Hoy, el programa que tenemos es muy completo en términos de actualidad, importancia, relevancia e impacto de los temas que se tratarán. Podría parecer que no dejaron nada para el próximo semestre. Si observan detenidamente, podrán vislumbrar dos líneas que atraviesan el programa, pero la más interesante, al menos para mí, es la tecnología.
En relación a la tecnología, normalmente encontramos dos polos opuestos en cuanto a actitudes: la tecnofilia y la tecnofobia. El término «tecnofilia» hace referencia a una perspectiva optimista y, en cierto modo, acrítica hacia los avances tecnológicos. Los tecnofílicos ven la tecnología de manera positiva, como algo digno de admiración. A menudo, se comportan como niños con un juguete nuevo, fascinados por los últimos descubrimientos.
Por otro lado, la tecnofobia es todo lo contrario. Los tecnofóbicos rechazan cualquier relación entre los avances tecnológicos y el progreso social o el humanismo, y suelen resaltar las características negativas de cualquier avance tecnológico.
Menciono esto porque, probablemente, los estudiantes presentes, especialmente aquellos de Educación que son mis alumnos, podrán juzgar las participaciones en el programa y, de algún modo, identificar las actitudes tecnofílicas o tecnofóbicas. Por supuesto, todos los demás estudiantes también son bienvenidos y pueden hacer lo mismo.
Aunque el profesor Arvelo menciona que etiquetar puede anular la capacidad crítica, también entiendo que nos ayuda a clasificar y a hacer un uso rápido de la memoria. Entonces, podrían estar clasificándonos entre los dos extremos mencionados anteriormente, o tal vez en puntos medios. Espero que Víctor se ubique en uno de esos extremos, al menos.
Abordaremos el tema titulado «Adiós a la mujer, dos padres: el impacto de la edición genética en la reproducción humana». Cuando se observa el título, podría parecer algo normal, ya que se suele decir que todos los bebés tienen dos padres. Sin embargo, hay profesores y profesoras que argumentarían que lo correcto es decir «un padre y una madre». Precisamente, este título hace referencia a dos padres masculinos con la posibilidad de reproducirse.
Históricamente, en las 24 horas de filosofía del semestre pasado, hablé sobre el transhumanismo y mencioné una herramienta de edición genética llamada CRISPR-Cas9. Esta «tijera genética» permite editar genes para, en cierto modo, construir al individuo deseado. Con herramientas como CRISPR-Cas9, se logró la edición genética para prevenir y eliminar enfermedades como la de parkinson. En 2013, se publicó un artículo científico que mostraba la eliminación del VIH de células humanas utilizando esta herramienta. También se ha utilizado para aumentar la fotosíntesis en plantas. Estos son avances documentados en la bibliografía, y que quienes estén interesados pueden consultar los artículos correspondientes.
Más recientemente, se ha avanzado y se ha descubierto una nueva herramienta en el campo de la edición genética, que nos lleva al tema de la reproducción entre dos padres masculinos.
La tecnología CRISPR-Cas9 ofrece un mayor potencial en la edición genética. Hace unos siete días, se publicó un estudio en el que investigadores japoneses liderados por Hayashi utilizaron herramientas biomédicas, como CRISPR-Cas9, para crear óvulos a partir de células extraídas de dos machos adultos. Este experimento logró convertir células masculinas en células sexuales femeninas, cambiando los cromosomas XY en XX.
Si esto se puede replicar en humanos, la presencia de una mujer para dar a luz no sería necesaria en términos absolutos. Esto ofrecería ventajas para parejas masculinas y homosexuales, que podrían tener sus propios hijos sin necesitar la intervención de células femeninas. Además, eliminaría el debate sobre si las parejas homosexuales deberían adoptar.
En lugar de recurrir a la gestación subrogada o «vientre de alquiler», estas parejas podrían tener hijos con los genes de ambos padres sin necesidad de la intervención de una mujer. Aunque no estoy muy informado sobre temas de farándula, este avance en la reproducción humana podría aplicarse a parejas como Ricky Martin y su pareja, por ejemplo, como menciona el compañero aquí. Pero, por lo pronto, también resolvería un problema para parejas en las que uno de los dos, o los dos, tienen problemas de fertilidad.
Existen implicaciones éticas en estos avances científicos. Aunque el experimento se realizó en ratas y mostró una baja tasa de supervivencia, sabemos que la ciencia tiende a mejorar, lo que podría resultar en mayores tasas de supervivencia en futuros experimentos con embriones modificados genéticamente, hijos de dos varones. Esta nueva técnica podría tener consecuencias en los próximos años.
Estos avances plantean cuestiones éticas relacionadas con el transhumanismo, como la creación de «bebés diseñados». Si se tiene la posibilidad de diseñar a un hijo, se podría optar por crear un ser humano «superior», lo que podría exacerbar las desigualdades. Por un lado, los individuos con ventajas genéticas tendrían una ventaja sobre aquellos que no han sido modificados. La película «Gattaca» aborda este tema, donde los individuos no modificados son llamados despectivamente «hijos de Dios».
Además, cualquier error en la edición genética de embriones podría tener consecuencias impredecibles. Por ejemplo, un científico chino modificó a dos gemelas, eliminando su posibilidad de contraer VIH, lo cual generó controversia y preocupación por el uso irresponsable de tecnologías como CRISPR-Cas9. Aún no sabemos cómo y con cuáles características naceran los posibles hijos y otros descendientes de estas niñas.
En resumen, aunque estos avances científicos en la edición genética y la reproducción humana tienen el potencial de cambiar vidas, también plantean importantes dilemas éticos y preocupaciones sobre sus posibles consecuencias negativas.
El avance en la edición genética y la reproducción humana plantea preocupaciones éticas, como la propiedad de la información genética y las consecuencias impredecibles de la manipulación del genoma.
Por ejemplo, el científico chino que modificó a dos gemelas cayó preso, pero aún no se sabe qué pasará con las niñas sometidas a cambios genéticos cuando eran embriones.
La propiedad de la información genética también es un tema ético importante. Al decodificar el genoma y obtener datos, surge la pregunta de quién debería ser el propietario de esa información. ¿Debería ser del individuo, de la compañía o del laboratorio que realiza la edición genética?
Estos avances en la ciencia también están relacionados con el desarrollo de inteligencia artificial, como Chat GPT. Hay personas que se dedican a vender comandos específicos que permiten comunicarse de manera más eficiente con la inteligencia artificial, consiguiendo mejores resultados en áreas como la generación de imágenes. Dicho sea de paso, este avance en la tecnología plantea interrogantes similares sobre la propiedad y el uso de la información.
En resumen, estos temas éticos requieren un debate filosófico y la consideración de diversas perspectivas. Aunque el tiempo es limitado, es fundamental generar dudas y reflexiones sobre estos temas, escuchando diferentes opiniones, como la mía en este momento y la que viene, del profesor Víctor Álvarez, para llegar a un entendimiento más profundo de las implicaciones éticas de estos avances científicos.
Muchas gracias.
[Aplausos]
Preguntas y respuestas:
Pregunta: ¿Qué tan cerca estamos de que sea masificado el hecho de que los padres puedan tener, desde el punto de vista genético, el hijo que desean tener?
¿Por qué está defendiendo al grupo de personas que representan intereses morales poco apropiados, al sugerir que los homosexuales ya no tendrán el problema de la adopción?
Respuesta:
No estoy defendiendo a ningún grupo en particular, sino que, como profesor de filosofía, intento plantear las cuestiones y poner las cartas sobre la mesa sin tomar partido. Mi propuesta es hacer «prolepsis», que consiste en anticiparse a las posibles consecuencias negativas previsibles que nuestras acciones puedan tener, y cómo esto se aplica al individuo, la sociedad, la ciencia y la tecnología.
Entonces, ¿cuál es el miedo? Si vemos alguna consecuencia negativa, ¿debemos detenernos? Si hubiera sido así, hoy no podríamos estar haciendo una transmisión en vivo, porque todas las acciones pueden tener consecuencias negativas. ¿Cómo se aborda esto? El mejor ejemplo lo tenemos aquí, en la academia, cuyo papel es preparar a la sociedad.
En cuanto a la posibilidad de masificación, estamos hablando de un descubrimiento que se publicó hace cinco días y que, por el momento, no tiene probabilidades de utilizarse en humanos. Entonces, ¿qué estamos haciendo con esto? Poniendo en manos de la sociedad del presente y del futuro la posibilidad de juzgar el avance y apoyar o no apoyar, como en el caso de CRISPR-Cas9, donde se vieron las posibilidades negativas y se aplicaron medidas coercitivas para no usarlo en humanos hasta que estemos seguros de que los procedimientos son seguros.