Roberto Antonio Reyna Tejada

Roberto Antonio Reyna Tejada nació en esta ciudad, Salcedo, el 22 de noviembre del año 1957. Es el octavo de once hermanos.

Su padre Antonio Reyna se jactaba de ser campesino, a veces comerciante y desde luego gallero. En este matrimonio su madre, Violeta Tejada, es la “intelectual”, de profesión costurera y famosa por sus lecturas. A temprana edad había tenido contacto con la juventud rebelde de la época, que procuraban la salida del poder del sátrapa de San Cristóbal, Rafael Leonidas Trujillo. Ella y su hermano estaban organizados en una de las tantas células clandestinas del Movimiento Revolucionario 14 de junio.

“La invasión del 59, el asesinato de mi hermano, el Dr. Manuel Antonio Tejada Florentino, en enero del 60 y el sacrificio de Las Mirabal supuso para todos una nueva idea del significado de la libertad y de la vida misma”. Violeta Tejada (madre de Roberto Reyna).

Ya antes, en el 1946, había sido asesinado su otro hermano, José, quién a la sazón era marino.

Estos acontecimientos y una infancia acompañada de relatos sobre estos hechos, y la observancia de la participación de su madre y sus hermanos mayores en la lucha en contra de los remanentes del trujillato y la democratización de la sociedad dominicana, marcaron la vida futura de Roberto Reyna, creando una alta sensibilidad por los problemas sociales y políticos del país.

Con pocos años de edad, a Roberto Reyna se le recuerda en el Liceo Emiliano Tejera, de Salcedo, por sus preocupaciones sociales y políticas.

Con tan solo 13 años cumplidos es víctima de un acto terrorista, el 28 de abril de 1971, siendo herido en la cabeza y la mano derecha, por la explosión de una bomba de fabricación casera que le produjo la pérdida permanente de la visión de su ojo izquierdo, lo cual no le amilanó ni redujo su deseo de superación académica y de compromiso patriótico.

De los quince a los veinte años entra al mundo de la política partidaria, donde predominaban las ideas marxistas. Mientras estudiaba el bachillerato en el Liceo Juan Pablo Duarte de la ciudad capital, orgánicamente se vincula a la Unión de Estudiantes Revolucionarios (UER) y a la Línea Roja del 14 de junio, y es ahí donde conoce las grandes contradicciones de los marxistas dominicanos de la época: Leninismo, Trokismo, Estalinismo y Maoísmo que absorbieron a nuestra juventud por varios años; tiempo en el cual se destaca como un estudioso de la política y muchas veces criticado por su “academicismo”. Formó parte del conjunto de militantes y cuadros políticos que al principio de la década de los 80 constituyeron el Partido de los Trabajadores Dominicanos, de cuyo Congreso de Fundación fue su relator y parte del equipo de formulación de su Programa de Gobierno. Desde allí, trabaja incansablemente en las actividades organizativas y políticas barriales, desempeñando importantes tareas de solidaridad con Haití, en la lucha por su democratización y contra la dictadura de los Duvalier y sus remanentes, posteriores a su caída.

Permaneció en las actividades partidarias hasta el año 1993, cuando decide renunciar a sus responsabilidades en una de las expresiones organizativas del Partido de los Trabajadores Dominicanos, que se había fraccionado 7 años antes y dedicarse exclusivamente al ejercicio de su vida académica.

Ingresó a la Universidad Autónoma de Santo Domingo en el año 1974, con apenas 17 años, y estudió la carrera de Sociología. Fue militante estudiantil del grupo Fragua y delegado al Claustro Universitario y a la Asamblea de Facultad de Ciencias Económicas y Sociales, por la Unión Nacional de Estudiantes Revolucionarios (UNER). Se graduó con honores en el año 1981, después de dedicar dos años de intensa investigación a su tesis de grado, presentada junto a quien siempre ha considerado como su hermano, el sociólogo y dirigente político Juan López.

En 1987 se graduó, en la primera promoción de la Maestría en Educación Superior, organizada por el Departamento de Post-Grado de la Facultad de Humanidades.

Ingresó a la Carrera Académica en el año 1979, como ayudante de profesor y en 1981 es Profesor de las Escuelas de Sociología y Filosofía. Posteriormente desempeñó el cargo de Coordinador de la Cátedra de Introducción a las Ciencias Sociales. Crece en su ejercicio docente, a la par que se expande la UASD, recorriendo los caminos polvorientos que conducen a los Centros Regionales de Mao y Santiago Rodríguez. Impactó y fue impactado por el Sur de la República, al viajar cada viernes al CURSO, Barahona, durante ocho años, dejando su sensibilidad y compromiso académico y social en las comunidades urbanas y rurales del suroeste.

Junto a su labor docente y desde el año 1990 hasta el 1993, desempeñó el puesto de Director del Departamento de Bienestar Estudiantil, donde se le recuerda por el liderazgo innovador en los programas de Becas, Estudio y Trabajo (BET), el Comedor Universitario, los servicios de salud para estudiantes, transporte y voluntariado estudiantil, y en la formulación del Reglamento General que aún rige dichos programas y que fuera aprobado mediante Resolución 91-132 por el Consejo Universitario, un 22 de noviembre del 1991.

Fue miembro Fundador, Coordinador y Secretario General, en varios períodos, de los Movimientos Académicos Universitarios Movimiento Profesoral de Transformación Universitaria (MPTU) y Alianza Académica, desde los cuales forjó su liderazgo en la comunidad académica y le servivrían de plataforma organizativa para alcanzar las importantes posiciones electivas desempeñadas en la UASD.

Todavía se le recuerda por su gran trabajo gremial en la Presidencia de la Asociación de Profesores del Centro Universitario Regional del Suroeste, en Barahona y por su labor como delegado titular y suplente, en varias ocasiones, en el Consejo Universitario de la UASD.

En el periodo 1993-1996 fue director de la Oficina de Personal Académico, OPAC y los logros obtenidos en este importante departamento son los siguientes: aplicación y ejecución de la Contratación Profesoral por tres años. Realizó la primera Evaluación General del desempeño docente en la historia de la Universidad. Esto permitió la promoción de categoría de cientos de profesores. Consolidó el programa del año Sabático para los docentes. Desarrolló varios programas de Perfeccionamiento y Especialización docente. Revolucionó la gestión administrativa de los expedientes académicos, incoporporando la informatización de los mismos, con la creación del primer módulo de Informática de la OPAC, transparentando el ingreso, evaluación, permanencia y egreso de la Carrera Académica y los derechos adquiridos en las Cátedras.

Cuando no desempeñó funciones directivas en la UASD, mantuvo su condición de profesor, acompañándola de un ejercicio productivo de su oficio de sociólogo en distintas instituciones gubernamentales y no gubernamentales y en la labor de orientación pública a través de su presencia regular en los medios de comunicación de masas, destacándose la creación, junto a otros dos colegas, del primer programa radial dominicano dedicado exclusivamente a la educación superior, Universidad 2000, de formato innovador y educativo.

Fue Vicerrector Académico en el periodo 1999-2002. Del desempeño en este puesto hablan sus propias conductas y resultados. Jugó un rol fundamental en la implementación de las Reformas y Modernización de la UASD, mostrando su valía ética con un ejercicio basado en la transparencia y la rendición de cuentas y en una fuerte vocación de servicio público que ha contribuido con el fortalecimiento del sistema educativo dominicano a través de su presencia, como miembro del Consejo Nacional de Educación (CNE), que dirige la educación preuniversitaria y en el CONESCYT, de la Secretaría de Estado de Educación Superior, Ciencia y Tecnología.

A la par, con su carrera académica en la UASD, alimentó su espíritu y vocación de maestro, participando en eventos y seminarios en el área de gestión, acreditación y evaluación en Educación Superior como son:

XIV Congreso Latinoamericano de Sociología, San Juan Puerto Rico.

Taller Proyecto Universidad 2000, Evaluación Educativa y Planificación Estratégica, organizado por la Unión de Universidades de América Latina, UDUAL, MÉXICO.

Congreso Mundial de Educación para Todos, organizado por la UNESCO, Dakar, Senegal.

Taller del Programa de Formación de Dirigentes de la Educación Superior, realizado en París, Francia, organizado por EL IIPE de la UNESCO y la Universidad de Monterrey de México.

Taller del Programa de Formación de Dirigentes de la Educación Superior, organizado por la UNESCO, Barcelona, España.

Jornada sobre Mecanismo para la determinación de prioridades para la Cooperación CYTED en la Región Iberoamericana, Antigua, Guatemala.

Congreso Mundial de Educación Superior, CMES+10, París Francia.

Actualmente esta casado con la señora Socorro Maria, con quien procreó a Violeta, estudiante del bachillerato del colegio Escuela Nueva, habiendo procreado con su primera esposa, Giselda Liberato, a Patricia Minerva, egresada con honores de la carrera de medicina en la UASD, Roberto Amaury, estudiante de término de la carrera de Ciencias Políticas en la UASD, y Alexis Gregorio, ingeniero Civil egresado de la Facultad de Ingeniería y Arquitectura de la UASD.

Fue Rector de la Universidad Autónoma de Santo Dominicana 2005-2008, electo de manera abrumadora por el Claustro Universitario el 15 de febrero del año 2005. En reconocimiento a su liderazgo internacional entre los rectores y directivos de la instituciones de educación superior de la Región, desempeñó elevadas posiciones en las siguientes instituciones de coordinaci´pn d erectores y universidaes de la Región: Presidente de la Unión de Universidades de América Latina y el Caribe (UDUAL), Vicepresidente de las Macrouniversidades Públicas de América Latina y el Caribe. Vicepresidente de la Organización Universitaria Interamericana (OUI) y Fundador y Vicepresidente de la Red Iberoamericana de Voluntariado Universitario (REDIVU), y representante de República Dominicana ante el Consejo Superior Universitario Centroamericano –CSUCA-.

Actualmente sigue impartiendo docencia en las aulas de la UASD, es Asesor del Poder Ejecutivo, en materia de educación superior, Presidente de la Fundación Manos Que Educan, miembro de la Comisión Técnica Nacional de Alfabetización, Coordinador Técnico Voluntario de la Junta Provincial de Alfabetización de Espaillat, Director Técnico de la Comisión Presidencial para la Modernización y Seguridad Portuaria, representante ante la Comisión Interamericana de Puertos de la Organización de Estados Americanos (CIP-OEA), directivo de la Red de Universitarios de América Latina y el Caribe para la Reducción de los Riesgos de Desastres (REDULAC), Coordinador del Equipo Científico-Técnico de la Rep. Dom. de la Enciclopedia Digital de la Historia y la Cultura del Caribe (www.encaribe.org), FUNGLODE-Universidad de la Habana, Consultor de la Escuela Nacional de la Judicatura (ENJ), en el Proyecto de Gestión de La Calidad de La Escuela Nacional de La Judicatura, orientado a su reconocimiento legal y acreditación Nacional e Internacional.

Habiendo acumulado importantes experiencias en distintos organismos nacionales e internacionales, en los últimos 10 años:

Primer Director de Cooperación Internacional de la Secretaría de Estado de Educación Superior, Ciencia y Tecnología (SEESCYT).

Miembro Fundador de la Red Iberoamericana de Acreditación y Evaluación de la Educación Superior (RIACES).

Representante del Organismo Signatario de República Dominicana ante el Programa Iberoamericano de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo (CYTED).

Miembro de la Delegación Oficial de República Dominicana ante la Asamblea General de la UNESCO

Miembro del Consejo Ejecutivo de la Asociación Dominicana para el Autoestudio y la Acreditación (ADAAC).

Evaluador Externo del primer programa de Evaluación de universidades dominicanas, con fines de acreditación.

Ha obtenido los siguientes reconocimientos en títulos académicos: Reconocido por la Universidad Simón Bolívar de Colombia, como Doctor Honoris y Causa y por la Universidad Soka de Japón, con el título Honor de Máxima Excelencia Académica.

A lo largo de su trayectoria de servicios en la UASD y al país ha recibido reconocimiento de parte de diversas instancias universitarias, por sus aportes significativos al impulso de su desarrollo institucional, como lo constituyen los casos de la Asociación Dominicana de Rectores Universitarios (ADRU), las Facultades de Artes y de Educación de la UASD. De igual forma lo han hecho las cooperativas de profesores y empleados de la UASD, diversas alcaldías de la República Dominicana, organizaciones estudiantiles, Asociaciones de Clubes, etc.